ARDOR PATRIOTICO

Aquest poema ja porta mes de 100 anys rondant i sembla que el van fer ahir pels "forerus" que ronden (entre altres llocs) al ABC.es.

Sempre amb roba esparregada i amb un profund complexe d'inferioritat. Sempre ofesos de nomès veure'ns respirar ... Ai, Senyor ... quina paciencia s'ha de tenir.

ARDOR PATRIOTICO per en D. Clodoaldo

!Hinchese el pecho de dolor transido¡
¡yergue la frente, altivo castellano!
¡Sea tu lloro el lloro de los fuertes
y tu altivez la del guerrero indómito!
Hombres sin fe destruyen tus leyendas:
en el mismo Español un tal Marquina,
en versos rimbombantes y sonoros
ha intentado del Cid la gran figura
presentar carcomida por los años,
¡como si el Cid no hubiese sido siempre
joven y audaz, valiente y aguerrido!
Si aun después que la Parca destructora
le segara la vida en día aciago
ganaba las batallas a trompones
¿Como pudo ser viejo? ¿Como pudo
ser impotente del Vivar Rodrigo
mientras de vida le quedase un soplo?

¡No mil veces ...! El Cid fué siempre grande
aunque sea pequeño su sepulcro.
Grande fue don Rodrigo; grandes fueron
sus múltiples hazañas y sus glorias ...
¡Y aquel que diga lo contrario, miente!
Un rudo catalan es quien lo dice
pero, ¡pardiez! que nadie ha de creerlo.

Y es otro catalan llamado Comas
(Ramon Nonato) quien sostuvo un dia
que la heroina de Aragón fué una hembra
nacida en Barcelona... ¡Catalana,
según él, fue Agustina Zaragoza!
Y hasta piensa probarlo y hasta enseña
triunfante la partida de bautismo
con que intenta mostrar el muy taimado
la razón de su aserto a todo el mundo.
Pues yo lo niego y negarelo siempre.
Y cuando hablando de ella intente Comas
probar al mundo que era catalana,
erguire la cabeza fieramente
respondiendo:"Tal vez, pero lo fijo

es que Agustina fué buena española".

Pero aun hay mas, pues dicen los diarios
que el cronista de Huelva ha descubierto
que en la gran epopeya conocida
gloriosamente por El 2 de Mayo
fue un catalan el heroe mas glorioso,
(llamado Andres Rovira por mas señas).
¿Como queda Daoiz? ¿Como Velarde
y el teniente Ruiz y otros campeones
que cual pequeños Cides pelearon
para dejar a salvo y sin mancilla
nuestro honor, nuestra fama y nuestro suelo?

D. Fernando de Antón y de los Suyos,
o sea el cronista de que hablamos,
dice que el catalan Andres Rovira
el héroe que alborotó las gentes
y al frente de un puñado de paisanos
al Parque se coló de Artilleria.
Y añade D. Fernando que su ejemplo
enardeció a Daoiz, quien tomó un arma
uniendose con ellos enseguida
como se unió después el gran Velarde,
como se unieron otros, que prolijo
sería enumerar, pues ya la historia
sus nombres consagró en letras doradas
en sendos inmortales monumentos.

Y digo yo: Pues mal que pese a todos
los Marquinas, los Comas, los Roviras
y Fernandos de Anton y de los suyos,
el Cid fue siempre el Cid, como fué siempre
lo que fuese Agustina Zaragoza,
y del bravo Daoiz lo mismo digo,
como digo lo mismo de Velarde.

Por eso exclamo en fiero ardor patriótico:
¡Yergue tu frente, altivo castellano!
Si hombres sin fe destruyen tus leyendas
¡Hinchese el pecho de dolor transido!
¡Sea tu lloro el lloro de los fuertes
y tu altivez la del guerrero indómito ¡